Carabelas, arpas, botellas o plumas,  son algunos de los ejemplos de sus particulares diseños .Desde 2007 Inés Figaredo diseña bolsos, un buen dia dejo la toga y vivió su sueño, esta asturiana de 36 años, plasmó sus necesidades de expresión artística y su creatividad en ellos.

Gracias a su empeño, sus diseños han llegado a la élite de la moda. Un original universo de  creación  hoy ocupa un lugar de excepción en los mejores escaparates de todo el mundo. Muchas celebritis han sucumbido a sus diseños, Lady Gaga, Rihanna, Paula Echevarría o la mismísima estilista de la famosa serie “Sexo en Nueva York”, Patricia Field, lucen sus diseños.

 ¿Cómo fueron tus orígenes? . Me siento a medio camino entre la moda y el arte y me niego a quedarme sólo con uno de los dos extremos. Toda esta aventura surgió de forma espontánea. Un buen dia (después de haberme formado y estar trabajando como abogado y broker marítimo) escuche mi mundo interior y quizás en mi subconsciente quería llevar conmigo del brazo todas aquellas cosas que iba imaginando, y no tener que separarme de ellas y dejarlas en la cama (en el diván!) o en casa.

Me inspiro en el arte, en todas sus manifestaciones, es la mayor fuente de inspiración ahora. Hay muchos artistas por los que siento fascinación, en su mayoría plásticos. Cualquier cosa que me pueda inspirar o despertar interés es tremendamente bienvenido. No habitual encontrar algo que de alguna manera te haga pararte y reflexionar. Para ello hay que estar muy despierto.

Mi estilo, es la ausencia total de estilo. Con los años he encontrado un placer infinito en la comodidad y en la distracción que supone el reto diario de mezclar adecuadamente las mil posibilidades que te ofrece un armario, es realmente una tortura .Desde hace tiempo sueño con tener un uniforme. El estilo propio mas que una búsqueda del propio ser es más bien una manifestación externa del mismo. Pienso que en ese sentido no tengo nada que demostrarme y que puedo no tener un estilo. Al menos no uno que llame la atención.

Mis diseños están pensados para, ni un hombre ni una mujer en especial, es algo más visceral e instintivo. La idea y su exquisito desarrollo es la única pauta marcada. A partir de ahí llegaran estos bolsos a quienes conecten con ellos y sientan que de alguna manera les inspiran, les divierten, asombran, fascinan….y surja un diálogo y una conexión entre ambos.

Para mí la moda es, trabajo. Siento una enorme fascinación por ella de alguna manera pero no quiero involucrarme mucho. Supongo que es como un guionista o un director de cine, trabajan en la industria pero apenas se les conoce. Ese es mi ideal. Las tendencias, las observo y si algo que siento me nutre y me puede llevar a algún lugar lo recojo y no lo dejo pasar. En cualquier caso estos bolsos están fuera de cualquier tendencia estacional.

Mi marca personal, radica en el concepto, en la filosofía de la firma. Trabajo sobre una idea, su estudio, su desarrollo y su resultado, ahí es donde reside la diferencia. No es sólo hacer de un teléfono, una gallina, una rueda o una lira un bolso. Es justificarlo, y buscar el equipo y las manos que fabriquen nuestra visión de esos objetos o ideas. Siempre hay una intención y todo esto es realmente complejo. En este caso lo literal deja de ser literal para convertirse en una pieza llena de argumento.

Inés Figaredo sobre unas metas muy definidas, con ilusión  por crecer y evolucionar. A partir de ahí ¿quién marca los límites?

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