Moda sostenible. ¿Alguna vez “pusiste de cabeza” todo el armario para encontrar esa falda que querías usar en un día especial y en su lugar te topaste con la chaqueta vieja que no veías desde hace dos años, con el cárdigan que usaste una vez o con la camisa a cuadros que juraste que amabas y todavía tiene puesta la etiqueta? Y de repente, entran en juego la culpa y los cuestionamientos: ¿cuándo en mi sano juicio creí que esto se me vería bien? ¿por qué habré gastado tanto dinero en este pedazo de tela? ¿a dónde irán a parar todas estas pilas de ropa cuando me deshaga de ellas?

Es justamente en estos interrogantes en donde entra en juego la tan nombrada “moda sostenible” o “moda ética”, un concepto que ha ganado fuerza y apoyo con el paso de los años. Entonces, ¿qué significa esto de la moda sostenible? Repasemos un poco: 

En resumidas cuentas (y para simplificar) la moda sostenible se refiere al concientizar sobre el impacto de la ropa en el medio ambiente. Y esto no solo se trata del efecto que tiene directamente la industria textil en la naturaleza, sino que también abarca los derechos laborales de quienes fabrican prendas. 

Para que tengas una idea, un estudio de las Naciones Unidas expuso que la industria de la moda es la segunda más contaminante en el mundo y arrojó las siguientes cifras:

• Un par de jeans requiere de 7500 litros de agua en su producción. 
• La industria textil es responsable del 8% de la emisión de gases de efecto invernadero en el planeta.
• Medio millón de toneladas de microfibra acaban en el mar cada año. 

Y esto no se acaba aquí. Cuando se trata de explotación y derechos humanos, un estudio de la Universidad de Berkeley reveló lo siguiente sobre India: 

• El 95,5% de los afectados en la explotación de la industria textil de India son mujeres y niñas. 
• El 99,2% trabaja forzadamente. 
• El 42,8% de los empleados comienza en la industria siendo menor de edad. 

Alarmante, ¿verdad? Sin embargo, es importante que sepas que tú puedes colaborar para hacer que este problema sea un poco menor cambiando de hábitos de consumo. Toma nota: 

Elige tus prendas con cuidado

Está bien que ese chaleco con flecos te quede fenomenal, pero antes de comprarlo piensa ¿realmente lo necesito? ¿seguirá de moda en uno o dos años? ¿lo podré combinar con alguna otra prenda de mi clóset? Si la respuesta a alguna de estas preguntas es no, entonces mejor piénsatelo dos veces antes de comprarlo. 

Recuerda que es mejor optar por prendas básicas que no pasen de moda y que se adapten a distintas situaciones, es decir, que puedas usar tanto en un día en la oficina como para salir de fiesta o ir a algún evento. Otro pilar de la moda sustentable es preferir calidad por sobre cantidad: invertir en una pieza más duradera evitará que muchas prendas acaben en la basura. 

Los materiales también importan

Parte de saber elegir una prenda adecuada es saber diferenciar qué materiales son mejores y menos contaminantes. Asegúrate de leer las etiquetas de las prendas y de preferir materiales de fibras orgánicas o fibras sintéticas recicladas. 

Elegir telas que no se arruguen también es importante, ya que no estarás desperdiciando energía con la plancha, sin mencionar que te ahorrarás de hacer esta tarea poco grata y de otras actividades extra -como limpiar una plancha quemada o armar una tabla de planchar). Si aún necesitas planchar y tienes una plancha negra, haz click aquí para aprender cómo limpiar una plancha quemada.

Prefiere lo artesanal o de segunda mano 

¿Quién dijo que no puedes encontrar la prenda de tus sueños en el mercado del pueblo o en la tienda de segunda mano de la esquina? Date una vuelta, conoce a los diseñadores locales y dale una oportunidad a esos tesoros vintage que están esperando por ti.

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